El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha hecho un llamado a la Unión Europea y al Mediterráneo para establecer una estrategia conjunta de gestión sostenible del agua. En un discurso en Palermo, Italia, García-Page enfatizó la importancia de abordar el cambio climático y la falta de coordinación que están poniendo en riesgo el suministro y la sostenibilidad ambiental en la región.
García-Page destacó que es fundamental garantizar el acceso al agua potable en todos los territorios europeos y mediterráneos, priorizando el abastecimiento humano sobre otros usos, como la agricultura. Propuso establecer un calendario común que promueva la eficiencia y la sostenibilidad en el uso del agua para el regadío, incluyendo prácticas como el riego por goteo.
El presidente regional también hizo hincapié en la necesidad de gestionar el agua de manera que no perjudique a los territorios vecinos, evitando situaciones en las que el exceso de consumo en un área afecte la disponibilidad de agua en otra. Asimismo, abogó por una mayor eficiencia en el uso agrícola del agua y por la implementación de tecnologías como la desalación para asegurar un suministro hídrico sostenible.
En este sentido, García-Page resaltó la importancia de respetar los principios naturales que han regido la distribución del agua a lo largo de la historia, y subrayó que la desalación debe convertirse en una prioridad para garantizar el futuro del suministro de agua en el Mediterráneo. En última instancia, instó a establecer un calendario preciso que regule las autorizaciones de regadío, asegurando que se cumplan condiciones de eficiencia en su uso.
La gestión del agua es un tema crucial en la agenda política y ambiental actual, y Emiliano García-Page ha hecho un llamado a la acción para garantizar un uso responsable y equitativo de este recurso vital en Europa y el Mediterráneo.
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